viernes, 25 de abril de 2014

Marianela

 Nela es una niña, la cual nadie le quiere debido a su fealdad y deformidad. Es lázaro de un joven, ciego de nacimiento. Juntos son muy felices, y ella se siente muy bien cuando está con él. Pablo, que así se llama el niño, le prometió que algún día se casaría con ella, cosa que le hizo mucha ilusión a Nela. Sin embargo, el padre de Pablo, consiguió el dinero suficiente para que un médico operara a su hijo, con la suerte de que éste pudiera recuperar la visión.
 La operación sale con éxito y Pablo recupera la vista, pero al veo lo fea y deforme que era Nela, le da de lado y se casa con su prima Florentina, que era todo lo contrario de Nela, es decir, bellísima. Tras esta noticia, Nela intenta suicidarse, pero no lo consigue.
 Finalmente, Nela se lleva la tristeza y el dolor a la tumba.
 Esta obra de Benito Pérez Galdós es una muy buena crítica. Nos enseña que la mayoría de personas se fijan en la belleza exterior y en la apariencia, como le pasó a Pablo cuando recuperó su vista. Pensaba que Nela era una muchacha guapísima, además de tener unos valores preciosos como la humildad y la bondad, y además con un gran espíritu. Mas al ver como era realmente, todos los valores que ella le había demostrado se esfumaron.
 La mayoría de personas se fijan en el atractivo, sin saber cuales son los valores de una persona. Incluso prefieren estar con una persona bella pero con valores negativos,  a con una persona fea con valores preciosos.
 En mi opinión, lo que realmente importa es la belleza interior de una persona, pues al fin y al cabo es de lo que una persona se enamora. Las personas que están con otras solo por su físico, no es amor, es deseo.